Ansiedad

La ansiedad es una emoción universal que todos experimentamos en algún momento en mayor o menor grado. Sin embargo, más de un 15% de la población llega a sufrir a lo largo de su vida algún trastorno de ansiedad, que se caracteriza por una serie de reacciones (cognitivas, fisiológicas y motoras) demasiado intensas y frecuentes o poco ajustadas a la situación en la que se encuentra la persona, como un examen, un viaje, un imprevisto doméstico o cualquier conflicto social1,2.

En muchos casos, estas manifestaciones –que incluyen sentimientos de miedo e inseguridad muy acusados, pero también síntomas físicos– llegan a ser patológicas y crónicas, dificultando la vida normal de los afectados o haciéndoles sentir experiencias muy desagradables e incapacitantes1,2.

Los llamados trastornos de ansiedad engloban un conjunto de problemas de salud mental entre los que destacan, por su frecuencia, los ataques de pánico o crisis de ansiedad y el trastorno de ansiedad generalizada (TAG).

El ataque de pánico es una reacción muy intensa de ansiedad y miedo, acompañada de síntomas físicos (palpitaciones, falta de aire, temblor, sudoración, pérdida de conocimiento...) y de la sensación de falta de capacidad para controlar la situación y hasta de morir en ese momento1,2.

Mientras, las personas con TAG muestran niveles muy altos de ansiedad casi todo el tiempo, incluso aunque no exista nada suficientemente importante que lo justifique, la intensidad de sus preocupaciones y su elevada activación fisiológica pueden llegar a bloquear la toma de decisiones cotidianas y a interferir de forma severa en su vida diaria1,2.

Los afectados sufren múltiples manifestaciones físicas, como insomnio, fatiga, dolores de cabeza, contracturas y tensión muscular elevada y síntomas digestivos, respiratorios y cardiacos inespecíficos1,2.

Más de 260 millones de personas sufren en el mundo trastornos de ansiedad, según datos de la OMS3. En España, estas enfermedades afectan al 6,7% de la población, lo que supone más de tres millones de personas, y su prevalencia es el doble en las mujeres (9,2%) que en los hombres (4%)4,5.

Existen tratamientos efectivos que, en la mayoría de los casos, permiten normalizar la vida de los afectados de forma satisfactoria mediante la combinación de medicamentos y psicoterapia.

Sin el tratamiento y el control adecuados, los trastornos de ansiedad tienden a agravarse y a empeorar la calidad de vida de los pacientes, que pueden desarrollar otros problemas de salud (insomnio, cansancio crónico, disminución de las defensas, etc.) e incluso otras enfermedades mentales, como depresión. Por ello, resulta esencial prevenir su aparición y cumplir correctamente las indicaciones médicas y los controles establecidos.

La pandemia de la COVID-19 ha supuesto para muchas personas con trastornos de la ansiedad y otras enfermedades crónicas la interrupción de su seguimiento, lo cual puede conllevar importantes riesgos para la salud de los pacientes.

De hecho, la crisis vivida como consecuencia de la epidemia global ha incrementado los problemas de salud mental en la población general y ha agravado la situación de las personas que ya sufrían alguna de estas enfermedades.

Según un estudio recogido en un informe de la Confederación Salud Mental España, un 6,3% de las personas con un trastorno mental grave necesitaron ingreso en unidades de agudos durante el pico de la pandemia, y más del 21% tuvo que aumentar la medicación6. Los problemas de ansiedad fueron los más frecuentes en este grupo de enfermos (54%)6.

 

Complicaciones de los trastornos ansiedad

Los trastornos de ansiedad pueden causar dificultades graves en la vida de las personas que los padecen, y esto puede conducir a la depresión y aumentar el riesgo de sufrir otros problemas de salud.

Algunas complicaciones asociadas a la ansiedad son7,8,9:

  • Depresión y otros trastornos de salud mental
  • Trastornos del sueño
  • Dolor crónico
  • Problemas digestivos e intestinales
  • Mayor riesgo de enfermedades cardiacas
  • Debilitamiento del sistema inmunitario
  • Aislamiento social
  • Abuso de sustancias tóxicas (alcohol, drogas y fármacos)
  • Problemas sociales y laborales

 

Si convives con alguna enfermedad crónica, no te quedes en pausa. Contacta con tu centro sanitario y retoma tus visitas de seguimiento.

 

Recursos sobre los trastornos de ansiedad

Si tienes un trastorno de ansiedad, te puede interesar:

 

Referencias:

  1. Los trastornos mentales - Confederación Salud Mental España: https://consaludmental.org/wp-content/uploads/2019/10/Con-Naturalidad.pdf
  2. Los trastornos mentales – Organización Mundial de la Salud (OMS): https://www.who.int/topics/mental_disorders/es/
  3. La salud mental – Organización Mundial de la Salud (OMS): https://www.who.int/mental_health/es/#:~:text=M%C3%A1s%20de%20300%20millones%20de,millones%20tienen%20trastornos%20de%20ansiedad
  4. Encuesta Nacional de Salud: https://www.mscbs.gob.es/estadEstudios/estadisticas/encuestaNacional/encuestaNac2017/ENSE2017_notatecnica.pdf
  5. Datos de población del Instituto Nacional de Estadística (INE) - 2020: https://www.ine.es/prensa/cp_j2020_p.pdf
  6. Salud mental y COVID-19. Un año de pandemia - Confederación Salud Mental España: https://www.consaludmental.org/publicaciones/Salud-mental-covid-aniversario-pandemia.pdf
  7. Anxiety disorders. National Institute of Mental Health. https://www.nimh.nih.gov/health/topics/anxiety-disorders/index.shtml. Accessed Feb. 26, 2018.
  8. Brown A. Allscripts EPSi. Mayo Clinic, Rochester, Minn. March 5, 2018.
  9. Anxiety disorders. National Alliance on Mental Illness. https://www.nami.org/Learn-More/Mental-Health-Conditions/Anxiety-Disorders/Overview. Accessed Feb. 25, 2018.

 

 

 

 

MA.11017.062021